En Facebook, en Instagram, en Twitter o incluso en tu banco… si, si, están por todos lados, pero vamos a centrarnos en el algoritmo que más nos interesa a los negocios digitales: El algoritmo de búsqueda de Google.
Como todos sabemos, Google se define a sí mismo como un sistema de clasificación mundial de información y claro, para buscar y encontrar resultados en esa maraña de cientos de miles de páginas web que es Internet es necesario algún sistema que las clasifique y las organice para que lleguemos, tecleemos una consulta en ese motor de búsqueda que todos utilizamos y se nos muestre justamente lo que queríamos encontrar.
¿Qué es el algoritmo de Google y para qué sirve?
Podríamos definir el algoritmo de Google como un conjunto de fórmulas matemáticas que se encargan de marcar los requisitos por los cuales Google posiciona los contenidos de cualquier portal online en sus listas de resultados al introducir determinadas palabras clave o keywords.
El algoritmo de Google, sirve en definitiva, para ordenar los resultados de búsqueda o SERPS de acuerdo a unos factores y clasificaciones internas, cuyas instrucciones se pueden encontrar en su página de directrices y buenas prácticas SEO.
Vamos, que es el algoritmo de Google el que decide la posición en la que sale tu web dependiendo de si has hecho todo lo que Google recomienda en cuando a optimización en buscadores. Dirás, ¡qué fácil! Pero no, no es tan sencillo, ten en cuenta que el algoritmo de Google cambia y se actualiza varias veces a lo largo del año, afectando al posicionamiento web de maneras dispares.
¿Qué factores son los que se tienen en cuenta en los Algoritmos de Google?
¡Pues muchos, son prácticamente infinitos! Las palabras de la consulta, relevancia, usabilidad e indexación de las páginas, la ubicación desde donde se realiza la búsqueda, el nivel de actualización del contenido, la configuración de tu navegador…
¿Cuál es el proceso que sigue un algoritmo?
Cuando realizamos una búsqueda o consulta en Google, el famoso algoritmo se pone en marcha, pasando (a grosso modo) por tres fases:
- El primer paso sería el crawling, es decir, el rastreo de millones de páginas que han autorizado que los bots de Google las analicen. ¿Cómo se eligen qué paginas deben ser rastreadas? Aquellas que responden directamente a la intención de búsqueda del usuario, siguiendo el enlazado interno y externo.
- A través de la indexación de las diferentes páginas de esa web, se distribuyen dependiendo de diversos factores de posicionamiento SEO y las va monitorizando progresivamente, con lo que ya empezarían a ordenarse en diferentes páginas, en función de lo que el algoritmo considere más relevante dependiendo de la búsqueda que se ha realizado y teniendo en cuenta también posibles variaciones semánticas de la consulta.
- La última parte del proceso, es el filtrado de resultados que no se ajustan a lo que el usuario ha buscado o simplemente puedan ser maliciosos, no mostrando esos resultados o mostrándolos en posiciones prácticamente inalcanzables dentro de los resultados.
Ejemplos de Algoritmos de Google
Desde el lanzamiento de RankBrain, han tenido lugar diversos lanzamientos y actualizaciones de algoritmos de Google a lo largo de los años, con el objetivo de mejorar los resultados y clasificaciones de las búsquedas:
- Google Panda (2011): Su objetivo es que las páginas web con poca calidad entren en los primeros resultados de búsqueda.
- Google Penguin (2012): Se lanzó para penalizar los sites que enviaban spam o realizaban compra de enlaces.
- Google Hummingbird (2013): Su misión es garantizar que se están ofreciendo los mejores resultados de búsqueda para consultas específicas y ya empezó a tener en cuenta las incipientes búsquedas por voz.
- Google Pigeon (2014): Para la mejora de la experiencia en búsquedas locales. Fue cuando empezó a surgir el término de SEO Local y los resultados en Google Maps.
- Google Mobilegeddon (2015): Para penalizar a aquellas páginas web con un diseño que no fuese responsive. Se empezaban a ver un gran aumento de búsquedas a través de dispositivos móviles y si tu web no era apropiada para mostrarse en estos dispositivos, aunque solo afectaba a búsquedas desde smartphone.
- Google Mobile First (2018): El diseño responsive ya se tiene en cuenta a la hora de posicionar una página web, tanto en escritorio como en dispositivos móviles.
- Google Medic (2019): Un nuevo sistema de clasificación para limitar el número de resultados de una misma web en las SERPS, siempre y cuando sean resultados relevantes.
- BERT (finales 2019): Esta actualización se centró en comprender mejor el contexto y la intención de las palabras en las consultas de búsqueda, lo que permitió a Google ofrecer resultados más precisos. (Su siglas significan Sistema de Representaciones de Codificador Bidireccional de Transformadores).