Seguro que alguna vez navegando por Internet, al rellenar un formulario o tratar de descargarte algún documento, foto, etc… seguro te ha aparecido un recaptcha muy parecido a la siguiente imagen:
¿Sabes para qué sirve? No solo es la evolución del código Captcha, sino que ya forma parte de nuestro día a día y está ahí ni para incordiar al usuario (aunque a veces lo parezca), ni por casualidad.
Sigue leyendo y te cuento todo lo que sé…
ReCaptcha: qué es
Como ya te he avanzado, el reCaptcha supone una importante evolución del código Captcha. Para definirlo tenemos que hablar de esta abreviatura, que comprende las siglas «Completely Automated Public Turing test to tell Computers and Humans Apart» y que en español viene a significar algo como “Test Público Completamente Automatizado de Turing para Diferenciar a los Seres Humanos de las Computadoras”. Sencillito, ¿eh?
Estamos ante una especie de test de Turing inverso, porque son los humanos los que tenemos que demostrar que somos quienes decimos ser y no máquinas. Por ello, se emplea para demostrar que al otro lado de la pantalla hay una persona real de carne y hueso, y no una máquina.
Esta prueba ha ido evolucionando con el paso de los años. No solo se volvió necesaria y completamente imprescindible, sino que también ha evolucionado para ser mejor, más completa. Por ello, en su primera generación ya mostraban palabras que procedían de proyectos de escaneo de textos, para que los usuarios no solo podamos verificar que somos humanos, sino también ayudar a digitalizar los textos con palabras que los ordenadores no podían entender.
Un proyecto desde luego interesante, original y divertido. Un proyecto que además conquistó el corazón de Google, quien lo compró en 2009 y fue ahí cuando empezó a utilizar reCaptcha, también con el objetivo de ayudar a digitalizar sus libros de Google Books. ¿Lo sabías?
Más adelante, en diciembre de 2014 la tecnología reCaptcha evolucionó con No CAPTCHA reCAPTCHA, que ya permitía a los usuarios verificar ser humano solo con pulsar un botón.
Internamente, ha sido una tecnología que no ha parado de crecer. Con el objetivo de prescindir de los códigos, Google ya empleaba algoritmos internos y examinaba datos como la dirección IP o las cookies activas del usuario. Así podía ver el comportamiento del usuario en la red, comprobando que efectivamente es humano.
Aparte de esto, en la actualidad vemos que emplean otros parámetros para comprobar que el usuario es humano. De hecho, cuando no está del todo seguro, añade más pruebas. Por ejemplo, te pide que selecciones las casillas en las que hay motos, semáforos, montañas, etc. O simplemente te pide que indiques que no eres un robot.
¿Qué novedades tenemos en reCaptcha v3? Una efectiva solución anti-spam
Esta tecnología ha venido para quedarse y no ha parado de crecer. Por ello, es importante hablar de reCaptcha v3.
El objetivo de esta implementación es que los usuarios no tengan que hacer ninguna acción para verificar que efectivamente no son bots, ni por medio de pruebas ni marcando la casilla ni verificando las cookies o movimientos que hacen por Internet. Este nuevo sistema asigna a cada usuario una puntuación diferente entre el 0.0 al 1.0, de más probabilidad de ser bot a menos.
Para determinar esta puntuación se tendrán en cuenta las interacciones que hacen los usuarios. Es decir, sus movimientos en la web. Así podrán ver si se comportan como un humano o como un bot, ayudándonos, por ejemplo, de manera muy efectiva a filtrar el spam de los formularios a la hora de desarrollar y diseñar páginas web.
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