Hola muy buenas, vamos al grano:
Tu proyecto puede fracasar.
Y te lo digo así, sin anestesia ni nada. Esto es algo que nadie quiere oír cuando está poniendo en marcha su negocio online aunque estadísticamente pase muchas más veces de lo que crees. Debes contar con esta posibilidad y bajar de tu nube emprendedora.
Pero una cosa es que el desastre pueda pasar y otra muy distinta es que no puedas hacer nada para evitarlo, y ahí es donde este artículo cobra sentido. Leerlo no garantiza el éxito, pero sí puede evitarte un fracaso estrepitoso.
No dejes que la ilusión en tu proyecto te convierta en un Kamikaze Share on XY no pretendo darte lecciones porque yo sea muy listo, sino todo lo contrario. Por tonto. Me siento con la autoridad suficiente para darte estos consejos porque he fracasado estrepitosamente más de una vez, y lo peor de todo es que lo podría haber evitado, o al menos podría haber amortiguado el golpe viéndolo venir… ten cuidadín.
Sé que a ti no te importa cuantas veces me he estrellado yo (y lo entiendo), pero a lo mejor mis consejos te pueden evitar muchos disgustos. Y te pueden ahorrar pasta, mucha pasta. Pasta de la que duele, esa que sale del bolsillo con toda la ilusión del mundo y que nunca vuelve, o se convierte en la mayor decepción de tu vida.
Además siendo sincero, como director de marketing de una agencia de desarrollo web me viene fatal que tú te estrelles, así que podríamos decir que este artículo lo escribo solo en mi beneficio, es egoísmo puro.
Como diría una novia pedorra: «No es por ti, es por mí»
Si crees que lo tienes todo controlado no hace falta que sigas leyendo.
¿Te sigue interesando? Pues allá vamos.
La pócima antifracasos estrepitosos se llama CONSULTORÍA.
Y esta consultoría se debe hacer antes de desarrollar tu proyecto web. No durante, y mucho menos después. AN-TES. Esto parece de cajón, pero si yo te contara…
Empecemos por el principio,
¿En qué consiste una consultoría Web?
Una consultoría web, dicho de un modo muy simple y resumido consiste en trazar un plan.
Gracias a este plan podremos tener claro qué pretendes conseguir con tu proyecto y cómo deberías hacerlo. Elaboraremos un documento que sirva como guía para que no terminemos «pariendo» una criatura llena de parches que nada tiene que ver con el proyecto que tú imaginaste ni con lo que yo considero un buen trabajo.
Y lo que es más importante, podrás descubrir si tu idea es tan brillante como pensabas y si realmente merece la pena ponerla en práctica.
Una buena consultoría responderá a preguntas muy importantes sobre tu proyecto, entre otras: ¿era tan fácil como pensaste en un primer momento?, ¿tienes el dinero suficiente para afrontarlo?, ¿soy yo la agencia adecuada para desarrollarlo?, ¿existe una necesidad real en el mercado?, y de no ser así ¿sabrás crear tú esa necesidad en el consumidor?…
Y repito, todo esto no te garantiza el éxito. Si yo tuviera la clave del éxito no dedicaría mi tiempo a escribir artículos como este, estaría demasiado ocupado en mi yate disfrutando de la vida. O tal vez escribiría best sellers contando milongas sobre lo fácil que es triunfar en la vida como algunos odiosos gurús del marketing.
Pero te aseguro que no es mi caso… no tengo yate (y no tiene pinta de que lo vaya a tener pronto), ni tengo intención de ayudarte escribiendo libros de mentira. Recuerda que te estoy contando esto solo por egoísmo.
Y ahora, de repente y sin avisar voy a cambiar mi estilo narrativo.
¿Por qué?, pues porque si has leído alguno de mis anteriores artículos sabrás que la brevedad no es mi fuerte. También habrás notado que me suelen sobrar comas cuando escribo. No suelo usar el punto y seguido y abuso de los puntos suspensivos… (lo ves)
Y el culpable de este experimento es un artículo de Luis Monge Malo que leí hace tiempo. El artículo en cuestión es este: El peor tipo de emprendedor y creo que no hace falta que te diga de qué va, pero te doy algunas pistas:
El peor emprendedor dice que ha dedicado mucho tiempo a pensar en su idea y que por eso es difícil que se le ocurra una mejora a alguien que no sea él.
Para el peor emprendedor las opiniones de sus familiares y amigos conforman una muestra representativa del mercado.
El peor emprendedor no puede sacrificar nada, porque todos los elementos de su idea son imprescindibles para triunfar.
Estas son solo tres frases escogidas casi al azar, pero el artículo está plagado de verdades como puños, verdades como un templo o templos con forma de puño (un tipo de templo que molaría bastante la verdad). Te recomiendo que lo leas si estás pensando lanzarte con tu proyecto web, te ayudará a bajar de tu peligrosa nube y a hacer un poco de autocrítica, que nunca viene mal.
Bueno a lo que voy, Luis escribió su artículo con un estilo que a mí me pareció genial, y de paso me demostró que cuando hablas claro en lugar de adornar tus frases el mensaje llega mucho mejor.
A ver cómo me sale:
Llegado el momento de poner tu proyecto web en manos de una agencia de desarrollo
- Tú no querrás pagar por tu consultoría.
- Yo jamás empezaré tu proyecto sin ella. Te la cobraré.
- A ti te parecerá carísimo
- Yo te estaré ahorrando dinero. Créeme.
- Yo sin consultoría no tengo ni idea de qué va tu proyecto.
- Tú tampoco. Aunque aún no lo sabes.
- Tú no pensabas que una consultoría era obligatoria.
- Yo antes tampoco y casi quiebro mi propia empresa.
- Yo necesito que tu proyecto termine dentro de plazo.
- Tú me lo exigirás. Con consultoría ok, sin ella nunca.
- Si tú no quieres invertir dinero en tu propio proyecto.
- Yo no quiero perder dinero trabajando contigo.
- ¿Y si después de gastar dinero en la consultoría resulta que mi proyecto no es viable?
- ¿En serio necesitas que responda a esta pregunta?. ¿No encuentras nada positivo en esa situación?
- Tú piensas que tu idea es la mejor y más novedosa del mundo.
- Yo no lo dudo, pero prefiero basarme en algo un poco más tangible y real.
- Sin una consultoría me culparás si tu proyecto no tiene éxito.
- Con ella es posible que también, pero yo podré tener argumentos para defenderme.
- Con una consultoría es posible que tu proyecto fracase.
- Sin ella es probable que lo haga estrepitosamente.
- Tú tienes prisa por tener tu proyecto terminado cuanto antes.
- Una buena consultoría te ahorrará muchos errores. Y esos errores son tiempo.
- Tú tienes muchas ganas de que tu proyecto triunfe.
- Yo también. No soy tu enemigo, convénceme y lucharé por él tanto como tú. Créeme.
Permíteme que haga una pequeña pausa para que el pajarillo de Twitter haga su trabajo:
La mitad de las empresas fracasan antes de cumplir 3 años. Muchas no llegan a cumplir meses. Share on XHay un proverbio chino que dice:
El fracaso más grande es no haberlo intentado nunca
No le voy a quitar la razón a este sabio ciudadano chino, pero estoy seguro de que no tenía una empresa de desarrollo web. De ser así, probablemente habría matizado:
El fracaso más grande es no haberlo intentado nunca después de pensarlo bien.
Tranquilo que ya termino, me he prometido desengancharme de los artículos interminables:
Cometer errores durante el desarrollo de un proyecto web implica perder mucho tiempo y mucho dinero, implica cabreos, y frustración, agobios, noches sin dormir, desilusión, ganas de mandarlo todo a la mierda… y como seguro que no quieres pasar por todo esto. Te aconsejo que hagas todo lo posible por evitar errores.
¿Significa esto que no puedo cometer ni un solo error?.
No hombre no, eso no lo vas a lograr por mucho que lo intentes. La vas a cagar pero bien, eso tenlo claro.
Pero eso no siempre es malo, los errores te forzarán a buscar soluciones y te obligarán a pensar en tu proyecto de otro modo, te abrirán los ojos y probablemente lo mejorarán.
Los errores que debes evitar son los evitables, que son los que joden. Esos que duelen en el orgullo porque sabes que te los has comido por pasarte de listo y querer ir demasiado rápido.
Conclusión:
Pese a las cifras negativas que te he dicho antes, claro que hay negocios online que triunfan e ideas que hacen ricos a sus dueños, pero que nadie te cuente milongas, los golpes de suerte son mentira. Siempre hay trabajo duro detrás de un «gran pelotazo».
Los errores que debes evitar son los evitables, los que joden. Share on XY es que con trabajo duro, esfuerzo y una buena planificación ¡hasta una mala idea puede triunfar!. Pero te aseguro que una buenísima idea sin todo lo anterior quedará en un intento fallido de un emprendedor iluso.
Yo te animo sinceramente a poner tu proyecto en marcha, pero recuerda que es fundamental una buena consultoría. Esto no solo hará que te tome en serio el desarrollador encargado de realizarla, sino también hará que tú te tomes en serio.
Cuando cualquier agencia te hable de este concepto y le ponga precio no estará intentando engañarte. Se llama profesionalidad y te aseguro que lo mejor que puedes hacer es rodearte de buenos profesionales.
Si quieres ahorrar dinero no lo hagas aquí. Compra productos de marca blanca, echa gasolina en gasolineras de bajo coste o conéctate a Internet con la clave de tu vecino… lo que sea menos ahorrar en lo que debe ser el inicio de un negocio del que pretendes vivir.
Así que recuerda, cuando estés pensando en tu idea añade en un lugar destacado de tu cerebro esta palabra: CONSULTORÍA. (y si te has quedado con ganas de más, haz clic para descubrir cómo podemos ayudarte)
2 comentarios en «Tu proyecto puede fracasar estrepitosamente»
Hola David! Genial artículo….(a mi también me gustan los puntos suspensivos….no se por qué) como siempre. Y si, tienes toda la razón siempre se necesita un consultor. Hasta los consultores necesitamos otros consultores!!!! (también me gustan mucho los signos de exclamación).
Un saludo;
César
¡Hola César!, sí ya intuía yo que eras de los míos… los puntos suspensivos enganchan ¿verdad? jeje.
Me he encontrado muchas veces que a mis clientes se les pone cara de otro cuando les hablo de consultoría, tienen la sensación de que quiero cobrarles de más porque consideran que no es algo necesario. Muchos piensan que al aportar la idea, todo lo demás viene solo sin tener en cuenta que esa idea en sí misma no es nada si no se piensa en todo lo demás (y este «todo lo demás» es muy amplio).
Y ojo no les culpo, es algo que no tienen porqué saber, por eso he escrito este post. He intentado transmitir la importancia de una buena consultoría, algo que como bien dices necesitamos incluso los consultores.
Un punto de vista externo y profesional te hace ver muchas más cosas.
¿Sabes que me han llegado a pedir presupuesto para un Airbnb, con «algunas cosas» de Idealista y con una sección para comprar «tipo Amazon»?…
Muchas gracias por comentar César!
Un abrazo 😉